Juan R. Stevens, de 51 años, de Burlington Township, oficial de corrección que se hallaba suspendido, se declaró culpable por el delito de mala conducta oficial al comparecer ante la Juez del Tribunal Superior Jeanne T. Covert en el condado de Burlington. Según el acuerdo de culpabilidad, el Estado recomendará que Stevens sea sentenciado a 5 años de prisión, incluyendo 2 años de inhabilitación de libertad condicional. Asimismo deberá renunciar a su empleo estatal y estará prohibió permanentemente del trabajar en un empleo público en New Jersey. Stevens está programado para ser sentenciado el 3 de enero de 2014.

Los Vice Fiscales Victor R. Salgado y Valerie R. Mayordomo procesaron el caso y tomaron la declaración de culpabilidad por parte de la División de Justicia Criminal. El caso fue investigado por la Policía Estatal de New Jersey y la División de Justicia Criminal, con la asistencia del Departamento de Correcciones, el Departamento de Policía de Mansfield, y el Departamento de Policía de Westampton.

Al declararse culpable, Stevens admitió que utilizó sus implementos de un oficial de corrección, incluyendo su tarjeta de identificación, para hacerse pasar por un oficial de policía y luego obligó a las prostitutas a tener relaciones sexuales con él en forma gratuita o por un precio reducido. La investigación estatal reveló que entre mayo de 2011 y Julio de 2012, Stevens se hizo pasar como un oficial de policía con el fin de obligar a 4 mujeres a tener relaciones sexuales en hoteles o moteles en el condado de Burlington. En cada caso, se presume se identificó como agente de la ley mostrando lo que pareció ser una insignia de la policía, por lo que las víctimas temían ser arrestadas. Stevens fue arrestado en marzo pasado por la policía Estatal en relación con los incidentes relacionados con 3 prostitutas que dijeron haber sido obligadas a tener relaciones sexuales en forma gratuita o con descuentos. Tras su detención, una comparación vital de ADN dio lugar a que Stevens sea acusado de usar tácticas similares para obligar a una cuarta mujer en mantener sexo en mayo de 2011 en un motel en Mansfield. La víctima alertó a la policía y las pruebas de ADN fueron tomadas. Fue la primera vez que se presentaron cargos como resultado de la nueva ley estatal firmada por el gobernador Christie, obligando tomar muestras de ADN de todas las personas detenidas por delitos violentos.

"Stevens traicionó el honor de su insignia, al usarla para cometer estos crímenes despreciables", dijo el Fiscal General Hoffman. " Su conducta es totalmente corrupta y repugnante .Todos los oficiales deben demostrar un alto nivel, y los que utilizan su autoridad o símbolos de autoridad para cometer crímenes se enfrentarán a la justicia".
"Por su conducta Stevens violó la confianza del público y utilizó su insignia para hacer daño, en lugar de proteger al público", dijo el director Elie Honig de la División de Justicia Criminal. "La gran mayoría de los funcionarios de prisiones trabajan con integridad y valentía para servir al público en un trabajo muy difícil, y podemos recuperar la confianza de manera agresiva al perseguir a los pocos que no lo hacen”.
"El mal uso de su posición oficial y amenaza de arresto para intimidar a las prostitutas y obtener favores sexuales es un delito repugnante. Este tipo de comportamiento tiene una respuesta firme, como fue el caso con el Sr. Stevens”, dijo el Coronel Rick Fuentes, Superintendente de la Policía Estatal de New Jersey. "Este caso pone en relieve la importante labor de nuestra Unidad de Corrupción Oficial y de sus asociados”.

Los Detectives Erick Goncalves y Anthony Carugno investigaron el caso de a través de la Oficina Unidad Sur del Estado de New Jersey. El Detective Daniel Ehnstrom del Departamento de Policía de Mansfield investigó el asalto sexual en Mansfield junto con la Policía Estatal. La investigación se llevó a cabo con la colaboración del Departamento de Correcciones de la División de Investigaciones Especiales y el Departamento de Policía de Westampton.

Después de su detención inicial por la Policía Estatal el 21 de marzo, Stevens fue suspendido sin goce de salario de su trabajo en Trenton, New Jersey.
La investigación reveló que Stevens, quien utilizó el nombre "Rick" o " Rich ", llamó por teléfono a las mujeres que anuncian sus servicios en línea, servicios de acompañantes adultos y dispuestos para encuentros sexuales. Stevens fue inicialmente identificado en relación con un incidente el 24 de febrero de 2012, en un hotel de Westampton. Stevens encontró a la víctima en el hotel, según lo acordado por teléfono, y se comprometió a pagar 125 dólares por 30 minutos de servicios. Sin embargo, mostró una insignia de estilo policial, se identificó como un oficial de policía, y la hizo a creer que estaba llevando a cabo una pesquisa de la prostitución. Emitió el comando "stand down" en un teléfono celular, que parecía tener una función de walkie -talkie. A continuación, comenzó a acariciar a la mujer, que creía que iba a ser arrestada, diciéndole que podría solucionarlo. Stevens tuvo relaciones sexuales con la mujer y se fue sin pagarle. Ese incidente fue reportado al Departamento de Policía Westampton.

Otra investigación identificó a dos prostitutas adicionales que fueron obligadas igualmente a realizar sexo oral con Stevens o mantener relaciones sexuales bajo la amenaza de ser arrestadas en moteles en Condado de Burlington:

En enero de 2012, Stevens llamó a una "acompañante adulto" y pidió que se reuniera con él en un motel en Maple Shade donde iba a pagar. Al entrar en la habitación del motel, Stevens mostró su placa y se identificó como un oficial de policía. Exigió ver la identificación de la mujer, que examinó. Luego le pidió mantener sexo oral con la mujer que accedió porque temía que sería arrestada y sabía que Stevens sabía que su domicilio por su identificación. Stevens obligó a la mujer a encontrarse con él dos veces más en febrero y marzo de 2012, obligándola a realizar sexo oral con él de forma gratuita.

En julio de 2012, Stevens llamó por teléfono a una mujer que anuncian sus servicios como acompañante adulto y accedió a reunirse con ella en un motel en Maple Shade. Stevens acordó pagar $ 160 dólares para mantener relaciones sexuales, y en la habitación del motel, dijo ser un oficial de policía y exigió un precio con descuento. por temor a la detención, la mujer solo recibió $ 100 dólares.

La investigación de ADN dio lugar a que Stevens sea arrestado el 25 de abril por cargos relacionados con el incidente de la cuarta mujer en un motel de Mansfield. La investigación reveló que Stevens se acercó a la víctima fuera del motel, donde ella vivía. Llevaba un uniforme azul y afirmó que era un oficial de policía que fue enviado para hablar con ella de los casos de prostitución y la actividad de la droga en el motel. Preguntó si podía entrar en su habitación y dentro mostró una insignia de tipo policial y le ordenó quitarse la ropa. La mujer dijo que ella tenía temor. Stevens lanzó a la mujer $ 15 dólares y salió del motel.

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