TRENTON-El Fiscal General Interino anunció que un técnico del Departamento de Transportación (DOT) de Nueva Jersey fue imputado hoy porque se alega que colectó miles de dólares en pago extra de horas de trabajo falsificando listados de turnos en sus hojas de asistencia que él no trabajó.
Kyle Rounsaville de 50 años de edad de Easton, Pensilvania fue imputado por un gran jurado del estado en cargos de segundo grado de inapropiada conducta oficial, de tercer grado de robo por decepción, de tercer grado por manipulación de documentos públicos y de cuarto grado por falsificar o manipular documentos. Los cargos son el resultado de una investigación de la Policía Estatal de Nueva Jersey, la División de Justicia Criminal y la Oficina del Inspector General del NJDOT.
Rounsaville está empleado como un técnico de construcción y mantenimiento del DOT que inspecciona las áreas de trabajo por violaciones de seguridad. Los técnicos de DOT trabajan extra en proyectos planeados y de emergencia, por los cuales son pagados de una cuenta de garantía establecida por los contratistas al principio del proyecto. Se alega que Rounsaville de manera rutinaria puso por tiempo extra de turnos diciendo que había trabajado en las áreas de empleo, cuando de hecho él nunca fue allí o preformó ningún trabajo durante los turnos. Desde Enero a través de Junio del 2013, se alega, que él robó un total de 308 horas de tiempo extra sumando $14,889. A cada técnico del DOT se le asigna un vehículo que contiene un GPS de rastreo. Se alega que Rounsaville intentó evadir el rastreo y esconder donde fue en su vehículo estatal comprando un bloqueador de GPS.
El Delegado del Fiscal General Matthew J. Lafargue y el Delegado del Fiscal General Anthony Picione, Jefe del Buró de Corrupción de la División de Justicia Criminal, presentaron el caso al gran jurado. El Detective Thomas Donnelly investigó de parte del Buró Oficial de Corrupción de la Policía Estatal. El Investigador Rochelle Miller investigó el caso por la Oficina del Inspector General del DOT bajo la supervisión del Jefe de Investigadores Thomas Flanagan. El Inspector General del NJDOT Johanna Barba Jones refirió el caso a la Policía Estatal.
Un cargo de segundo grado de conducta oficial inapropiada lleva una sentencia de 5 a 10 años en la prisión del estado, con un tiempo mandatario de cinco años inelegible de libertad condicional, y una multa de hasta $150,000. Un cargo del tercer grado lleva una sentencia de 3 a 5 años en la prisión del estado, con una sentencia obligatoria de dos años de inelegibilidad de libertad condicional, y una multa de hasta 15,000. Un crimen del cuarto grado lleva una sentencia obligatoria de hasta 18 meses en la prisión del estado y una multa de $10,000. La acusación judicial es solamente una acusación y el acusado es inocente hasta que se pruebe culpable.
La acusación formal se le presentó al Juez de la Corte Superior Pedro J. Jimenez Jr., en el Condado de Mercer, quién asignó el caso al Condado de Morris, donde se le mandará a Rounsaville que aparezca en la corte a una fecha más tarde para las disposiciones.
### |