TRENTON – El Fiscal General Interino John J. Hoffman anunció que un hombre de Spring Valley, N.Y., fue sentenciado a la prisión del estado en conexión con 24 kilogramos de cocaína que la Policía Estatal de Nueva Jersey confiscó de su auto en Route 287 en Parsippany-Troy Hills el año pasado.
Beningo Gomez-Morales, 24, de Spring Valley, N.Y., fue sentenciado el Viernes (Julio 18) a 10 años en la prisión del estado sin la posibilidad de libertad condicional por 3 ½ años, por el Juez de la Corte Superior Robert J. Gilson en Morris County. Él admitió culpabilidad el día 14 de Mayo a un cargo en primer grado de posesión de cocaína con intención de distribuirla.
Su novia, Eridania Batista DeLeon, 31, de Spring Valley, que era un pasajero en el auto cuando la cocaína se confiscó, fue admitida (Julioy 18) en el programa de Pre-Trial Intervention Program. Se le mandó que hiciera 50 horas de servicio de comunidad. Ella admitió culpabilidad el día 14 de Mayo a un cargo en tercer grado de obstaculizar aprehensión o prosecución.
El Delegado del Fiscal General Amy Sieminski procesó el caso y trató la sentencia de parte del Buró de Crimen Organizado y Pandillas de la División de Justicia Criminal.
El día 27 de Septiembre del 2013, los policías estatales pararon a un Subaru Tribeca manejado por Gomez-Morales después que salió de la Route 80 East y se entró en la Route 287 North, casi chocando con una limosina. La parada se hizo durante una vigilancia en relación a una investigación por la Unidad Norte de Tráfico de Drogas de la Policía Estatal de Nueva Jersey (New Jersey State Police Drug Trafficking North Unit), la cual había recibido información de que el vehículo se estaba usando para transportar narcóticos a través de Nueva Jersey. Después que los dos ocupantes dieron información conflictiva acerca de donde empezó el viaje, los detectives pidieron y recibieron consentimiento para registrar el vehículo.
Después de abrir la puerta trasera del vehículo, notaron un compartimento escondido debajo de los asientos traseros, el cual estaba parcialmente abierto, revelando el material empaquetado. Le dijeron a Gomez-Morales que abriera la trampilla, lo cual él hizo, y los detectives encontraron 24 kilogramos de cocaína empaquetada. Gomez-Morales admitió que le habían pagado $15,000 para que transportara los narcóticos de California a New York.
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