TRENTON – El Fiscal General Interino John J. Hoffman anunció que tres hombres fueron acusados judicialmente en cargos en primer grado relacionados a un incidente en el que un policía encubierto fue tiroteado y herido durante un alegado intento de robo armado fuera de la tienda Marshalls en Garfield hace hoy exactamente un año.
La Division of Criminal Justice obtuvo una acusación judicial de gran jurado de 10 cargos cargando a los siguientes hombres con conspiración (en segundo grado), intento de robo (primer grado), posesión ilegal de un arma (en segundo grado), posesión de un arma con propósito ilegal (en segundo grado), posesión de un arma mientras cometiendo una ofensa de drogas (en segundo grado), y tres cargos de asalto agravado (en segundo, tercero y cuarto grado):
- Rafael Vásquez, 26, de Passaic,
- Melvin Guzmán, 20, de Garfield, y
- Patrick Morel, 22, of Clifton.
Vásquez también está cargado en la acusación judicial con cargo en primer grado de intento de cometer asesinato, y Morel está cargado en tercer grado con eludir a la policía. Además, Vásquez fue cargado hoy en una acusación de gran jurado separada por posesión de un arma por un convicto.
El atento de robo y tiroteo ocurrieron durante una operación de ´buy-bust´ conducida por el Bergen County Prosecutor’s Office Narcotics Task Force (Comité Especial de Narcóticos de la Oficina del Procurador del Condado de Bergen). Un policía encubierto trabajando para la Task Force se alega planeó comprar mariguana de Guzmán en Abril 22, 2014 fuera de la tienda Marshalls en Garfield. Se alega que los acusados habían hecho planes de robar al oficial encubierto, trayendo una pistola y una bolsa de orégano en vez de mariguana. Guzmán y Vásquez estaban dentro de un auto conducido por Morel cuando el oficial llegó a la 1:30 p.m.
Guzman salió del auto de Morel y entró y se sentó en el lado de pasajero en el auto conducido por el oficial encubierto. Poco después, se alega que Vásquez salió del asiento trasero del vehículo de Morel, se acercó al lado del conductor donde estaba el oficial encubierto y blandió una pistola de calibre .380, mandando al oficial a que le diera todo su dinero. El oficial encubierto y Vásquez entraron en un forcejeo al tiempo que miembros de la Task Force vinieron al lugar, identificándose como policías. Durante el forcejeo, Vásquez se alega disparó al oficial encubierto en la cadera y el tobillo. Vásquez luego apuntó su arma a los oficiales que se estaban acercando mientras intentaba huir. Dos de los oficiales dispararon sus armas, hiriendo a Vásquez en el hombro izquierdo, oreja y cadera. Vásquez y Guzmán fueron arrestados allí mismo. Morel huyó en el vehículo y luego fue arrestado en el Garden State Parkway sin incidente.
“Los policías poner sus vidas a riesgo todos los días para protegernos,” dijo el Fiscal General Interino Hoffman. “Tenemos que hacer nuestra parte para mantenerlos salvos, agresivamente procesando a cualquiera que los amenacen con un arma mortal.”
“Este oficial encubierto tuvo suerte que escapó vivo,” dijo el Director Elie Honig de la Division of Criminal Justice. “Estos acusados han demostrado que plantean una grave amenaza a nuestras comunidades, y nuestra intención es mantenerlos detrás de las barras para que no hagan daño a nadie.”
El Delegado del Fiscal General Anthony P. Torntore presentó el caso al gran jurado del estado de parte de la Division of Criminal Justice. Fue investigado por los detectives de la State Police Major Crime Unit y los detectives de la Division of Criminal Justice asignados al Attorney General’s Shooting Response Team. El Delegado del Fiscal General Vincent J. Militello también fue asignado a la investigación. Bajo la directiva del Fiscal General, el Shooting Response Team se manda al lugar del incidente para investigar cuando la policía estatal, investigadores de condados, u oficiales de la task force están envueltos en un tiroteo.
Un cargo en primer grado lleva una sentencia de 10 a 20 años en la prisión del estado, incluyendo un periodo sin libertad condicional igual al 85 por ciento de la sentencia impuesta. Los cargos del intento de robo llevan una multa de hasta $500,000, y el atento de asesinato lleva una multa de hasta $200,000. Un cargo en segundo grado lleva una sentencia de 5 a 10 años en la prisión del estado y una multa de hasta $150,000. El cargo de posesión de un arma por un convicto lleva un término mandatario sin la posibilidad de libertad condicional de 5 años, y otros cargos de armas llevan un término mandatorio sin la posibilidad de libertad condicional igual a un tercio a la mitad de la sentencia impuesta o 3 ½ años o lo que sea más grande. Un cargo en tercer grado lleva una sentencia de 3 a 5 años en la prisión del estado y una multa de hasta $15,000, mientras cargos en cuarto grado llevan una sentencia de hasta 18 meses en la prisión del estado y una multa de hasta $10,000.
Las acusaciones son meramente acusaciones y los acusados son inocentes hasta que se prueben culpables. La acusación judicial fue presentada al Juez de la Corte Superior Pedro J. Jimenez Jr. en Mercer County, el cual asignó el caso a Bergen County, donde los acusados comparecerán en la corte a una fecha más tarde.
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