| TRENTON – El Acting Attorney General John J. Hoffman anunció que un hombre fue acusado judicialmente hoy en cargos que incluyen atento de asesinato porque se alega disparó a la gente que había en una fiesta en una casa en Woodbine el año pasado. El hombre se alega apuntó la pistola a dos de los policías estatales que respondieron al tiroteo, causando que uno de los policías le disparara. Nadie resultó herido por ninguno de los disparos.
Bajo la Attorney General’s Directive on Police-Use-of-Force Investigations (Directiva del Fiscal General de Investigación por el Uso de Fuerza por la Policía), el incidente fue investigado por el Attorney General’s Shooting Response Team (Equipo de Respuesta del Fiscal General a Tiroteo), compuesto por los investigadores de la Division of Criminal Justice y la New Jersey State Police Major Crime Unit. Como resultado de la investigación, el Director Elie Honig de la New Jersey Division of Criminal Justice determinó que la presentación de la policía envuelta en el tiroteo al gran jurado no era requerida bajo la Directiva, porque los hechos indiscutiblemente demostraron que el uso de fuerza fue justificado bajo la ley. La investigación incluyó entrevistas de testigos, análisis forenses del lugar y otra evidencia.
El testimonio y evidencia de la investigación del Shooting Response Team fue presentado al gran jurado del estado por consideración en cargos contra del hombre armado y de otro hombre que se alega estaba armado en la fiesta. El gran jurado hoy acusó judicialmente a José A. López, 30, de Woodbine, en cargos incluyendo en primer grado atento de asesinato, porque se alega disparó a la gente en la fiesta, y en tercer grado de asalto agravado, porque se alega apuntó la pistola a los dos policías estatales. El segundo hombre, Jermaine Russell, 27, de Woodbine, fue cargado en un incidente separado en segundo grado con posesión ilegal de una pistola, porque se alega la tenía en su posesión en la fiesta.
El incidente ocurrió aproximadamente a las 2:30 a.m. en Nov. 16, 2014 fuera de la casa en el bloque 600 de la Washington Avenue en Woodbine donde se estaba celebrando una fiesta. Dos de los policías estatales de la New Jersey State Police Woodbine Station estaban vigilando la fiesta porque la State Police había recibido un aviso de que podía haber retaliación en la fiesta de un tiroteo previo en Woodbine. Los dos policías no estaban en uniforme, pero uno tenía la marca de la State Police en su chaqueta. Un poco antes del tiroteo, los dos policías, que estaban vigilando la fiesta en posiciones escondidas en frente de la calle, llamaron por respaldo de policías en uniforme porque oyeron una conmoción creciente en la fiesta y un altercado físico empezó. Ellos vieron subsecuentemente a López emerger hacia la Washington Avenue de detrás de la casa donde la fiesta tenía lugar y se acercó a la gente que estaba enfrente de la casa. López se alega levanto su mano en el aire y disparó varias veces con la pistola. López luego se alega apuntó la pistola al grupo de gente y disparó varias veces. Nadie fue tocado por los disparos.
Los policías estatales rápidamente desenfundaron sus armas de servicio de 9mm y empezaron a correr hacia López. Mientras estaban corriendo ambos gritaron “State Police” y “suelten las pistolas.” López se alega se volvió hacia los policías estatales, apuntando su arma a ellos. Uno de los policías inmediatamente disparó 4 rondas de su arma de servicio a López, antes de que el arma mal funcionara. Ninguna de las balas hirió a López o a ningún otro. Los policías oyeron más disparos del frente de la casa donde la fiesta tenía lugar. Estos no vieron quien fue responsable por los tiroteos.
López se alega huyó hacia Washington Avenue, con 2 de los policías corriendo detrás de él, y éste corrió a un área en el bosque detrás de las casas. El policía que había disparado el arma a López se cayó y sufrió pequeñas lesiones durante la persecución a pie. Los 2 policías estatales esperaron a que los policías uniformados llegaran, con los que rodearon el bosque para prevenir que López escapara. Los policías entraron en el bosque, y un policía uniformado arrestó a López sin que éste resistiera. Una pistola de .380-calibre con un tambor vacío se encontró en el bosque cerca de 40 pies de donde López fue arrestado, a largo de la ruta que él corrió. Un análisis balístico emparejó la .380-calibre a seis fundas de balas que se encontraron en el lugar donde los policías alegan vieron a López disparar su arma.
Russell, que atendió a la fiesta, fue cargado con posesión de otra pistola de .380-calibre que se encontró detrás de una residencia junto a la casa donde se celebró la fiesta. Evidencia forense emparejó a Russell con la pistola.
López fue acusado de los siguientes cargos:
- En primer grado de atento de asesinato,
- En segundo grado de asalto agravado
- En tercer grado de asalto agravado
- En tercer grado de asalto agravado
- En cuarto grado de asalto agravado
- En segundo grado posesión ilegal de un arma de fuego
- En primer grado posesión ilegal de un arma de fuego
- En segundo grado posesión de un arma por un convicto,
- En segundo grado posesión de un arma para propósito criminal,
- En cuarto grado de resistir arresto, y
- En cuarto grado de obstrucción de ley administrativa.
Cargos en primer grado llevan una sentencia de 10 a 20 años en la prisión del estado – incluyendo un término sin la posibilidad de libertad condicional igual al 85 por ciento de la sentencia impuesta por el cargo de atento de homicidio – y una multa de hasta $200,000. Cargos en segundo grado llevan una sentencia de 5 a 10 años en la prisión – incluyendo un término sin la posibilidad de libertad condicional igual al 85 por ciento de la sentencia impuesta por el cargo de asalto agravado – y una multa de hasta $150,000. El cargo de posesión de un arma por un convicto lleva un término mandatario sin la posibilidad de libertad condicional de 5 años, y los otros cargos de armas llevan una sentencia mandataria sin la posibilidad de libertad condicional igual a un tercio o a la mitad de la sentencia impuesta o 3 ½ años o lo que sea mayor. Cargos en tercer grado llevan una sentencia de 3 a 5 años en la prisión y una multa de hasta $15,000, mientras que cargos en cuarto grado llevan una sentencia de hasta 18 meses y una multa de hasta $10,000.
El Supervising Deputy Attorney General Andrew B. Johns presentó los casos envolviendo a López y Russell al gran jurado del estado de parte del Attorney General’s Shooting Response Team.
Las acusaciones son meramente acusaciones y los acusados son inocentes hasta que se prueben culpables. Las acusaciones fueron presentadas al Juez de la Corte Superior Mary C. Jacobson en Mercer County, quién las asignó a Cape May County, donde se les ordenará a López y a Russell que aparezcan para ser procesados. López está en la cárcel de Cape May County Jail con libertad bajo fianza puesta en $500,000. Russell está libre en una fianza de $75,000.
Con respecto a la envoltura de los policías estatales en el tiroteo, después de analizar todos los hechos y circunstancias de este incidente, la Division of Criminal Justice concluyó que el policía estatal que disparó a López actuó apropiadamente bajo la Attorney General’s Use-of-Force Policy en que usó un nivel de fuerza aceptable en disparar su 9mm arma de servicio a López para protegerse y para proteger a su camarada, el otro policía estatal. Un oficial de implementación de la ley puede usar fuerza mortal en New Jersey cuando razonablemente cree que es inmediatamente necesario proteger al oficial o a otra persona de inminente peligro de muerte o de serio daño corporal.
El asunto fue revisado por el Director Honig de la Division of Criminal Justice. Todas las partes de la Attorney General’s Directive on Police-Use-of-Force Investigations que estaban en efecto durante el curso de la investigación fueron cumplidas. ### |
