Bajo la Attorney General’s Directive on Police-Use-of-Force Investigations (Directiva de la Oficina del Fiscal General de Investigaciones del Uso de Fuerza por la Policía) el incidente fue investigado por el Attorney General’s Shooting Response Team (Equipo de Respuesta a Tiroteos del Fiscal General), compuesto de investigadores de la Division of Criminal Justice (División de Justicia Criminal) y la New Jersey State Police Major Crime Unit (Unidad de Crímenes Especiales de la Policía Estatal de Nueva Jersey). Como resultado de la investigación, el Director Elie Honig de la New Jersey Division of Criminal Justice determinó que la presentación al gran jurado por la policía envuelta en el tiroteo no era requerida por la Directiva, porque los hechos indiscutiblemente demostraron que el uso de la fuerza fue justificado bajo la ley. La investigación incluyó entrevistas de testigos y análisis forense del lugar del crimen y otra evidencia.

Testimonio y evidencia de la investigación del Shooting Response Team fueron presentados al gran jurado del estado por consideración en contra del conductor del que se alega golpeó a los policías con el auto. El conductor, Juan Gutiérrez-Valencia, 29, de Pemberton Township, fue acusado judicialmente de los siguientes cargos:

1. en cuarto grado de asalto agravado,
2. en tercer grado de resistir arresto,
3. en cuarto grado de resistir arresto huyendo, y
4. en cuarto grado por obstruir la administración de la ley en una función gubernamental.

El incidente ocurrió en la tarde de Julio 7 del 2014, mientras detectives de la New Jersey State Police estaban conduciendo una transacción de drogas envolviendo un detective encubierto que había arreglado la compra de 2 kilogramos de metanfetamina cristalizada de Gutierrez-Valencia y otro sospechoso en la parte de atrás de un solar de parqueo de un hotel en Fellowship Road en Mount Laurel. El plan era arrestar a los vendedores de metanfetamina una vez que los detectives encubiertos confirmaran que los sospechosos habían traído las drogas. Miembros de la State Police Technical Emergency and Mission Specialists Unit o TEAMS (Unidad Técnica de Emergencia de la Policía Estatal y Especialistas de Objetivo) estaban preparados para arrestar a los sospechosos después de que el detective encubierto se había quitado de enmedio. La operación fue parte de un investigación conjunta, “Operation Speed Racer,” liderada por la State Police y la U.S. Drug Enforcement Administration en la distribución de metanfetamina y heroína en los condados de Burlington y Ocean.

Después de que los sospechosos llegaron en un Mercedes sedan con ventanas de vidrios tintados oscuros, el detective encubierto entró en el auto de los sospechosos, verificó que las drogas estaban allí, salió del auto, y le dio la señal a la TEAMS Unit para que hicieran el arresto. Cuando se dio la señal, Gutiérrez-Valencia estaba en el asiento de conductor del Mercedes. El otro sospechoso estaba sentado en el asiento de pasajeros del auto del detective encubierto. El Mercedes y el auto del detective encubierto estaban aparcados en la última hilera del solar de parqueo, frente a una curva de concreto, con un espacio de parqueo entre ellos.

La TEAMS Unit estaba usando 2 vehículos ese día. El primer vehículo era un van blanco, grande sin marca. El segundo vehículo era un vehículo SUV sin estar marcado. Los vehículos no estaban equipados con cameras en el tablero de mandos, no tenían luces de emergencia y no se usaron sirenas. Los 2 vehículos de TEAMS se pusieron detrás de los autos aparcados en los que los sospechosos estaban sentados. Tan pronto como la van de TEAMS se paró, los policías estatales hicieron los arrestos. Los policías estaban vestidos en los uniformes normales de la TEAMS Unit, overoles verdes con las marca de la State Police, chalecos de tácticas con las marcas de la State Police, y cascos.

Cuando los primeros policías salieron por la parte de atrás del van, Gutiérrez-Valencia condujo el Mercedes sedan hacia atrás, haciendo que las ruedas chirriaran, mientras viraba las ruedas hacia la izquierda. El Mercedes le dio al van, causando que la puerta de atrás se cerrara de golpe cuando los policías estaban saliendo. El Mercedes también chocó a 2 policías de TEAMS que habían salido del van, causando menores lesiones a ambos. En ese momento, el tercer policía de TEAMS que salió del van disparó 2 tiros de su M4 carabina a través del parabrisas del Mercedes a Gutiérrez-Valencia. Una de las balas rozó al brazo derecho de Gutiérrez-Valencia. El Mercedes se paró, detrás del van, a lo largo del sitio de pasajero del TEAMS SUV. Los otros policías TEAMS removieron a fuerza a Gutiérrez-Valencia del Mercedes e intentaron arrestarlo. Gutiérrez-Valencia físicamente resistió hasta que los policías forzaron sus manos con las esposas con la ayuda de la K-9. El otro sospechoso fue arrestado sin el menor incidente. Gutierrez-Valencia fue tratado en el Cooper University Hospital y fue dado de alta el mismo día en la custodia de la policía.

Una vez que Gutiérrez-Valencia estaba fuera del auto, una pistola de 9mm fue encontrada a plena vista en el sitio donde él estaba sentado. Un tambor relleno para la pistola, se alega, fue encontrado en el bolsillo de Gutiérrez-Valencia. Un allanamiento fue ejecutado y los detectives confiscaron 2 kilogramos de metanfetamina junto con la pistola, la cual se descubrió que había sido robada. Fragmentos de las balas de los disparos de los policías fueron encontrados en el auto, y el asiento del conductor fue penetrado por una de las balas. Toda la evidencia forense balística, incluyendo los cartuchos de las balas del lugar, la M4 carabina del policía, y el parabrisas destrozado del Mercedes, fueron examinados y se encontró que eran consistentes con las declaraciones de los testigos y el video de vigilancia.

Todos los oficiales de implementación de la ley dieron declaraciones formales. El policía que disparó dijo que él oyó las ruedas chirriar, sintió que se le había golpeado al van, y vio al Mercedes moviéndose en reversa pasando la puerta del van al tiempo que él y sus colegas salían. Él también vio a los 2 TEAMS policías que salieron del van “sin equilibrio”, como si estuvieran bajo coacción y en peligro. Él no los vio actualmente ser golpeados. Él salió fuera del van y vio al Mercedes que estaba en una posición de que podría atropellarlo y a los otros policías. Él declaró, que tenía miedo por su vida y de que las vidas de sus colegas policías estaban en peligro, él disparó 2 veces al Mercedes. Él apuntó hacia la posición del conductor ya que no podía ver al conductor debido a las ventanas tintadas del Mercedes. El policía dijo que el Mercedes dejó de moverse, así que él puso su rifle en un sitio seguro y se movió para ayudar a sus colegas a hacer los arrestos. Los dos policías que fueron golpeados por el Mercedes fueron tratados en Virtua Hospital y dados de alta el mismo día.

En un video de vigilancia del hotel se puede ver al Mercedes rápidamente dando marcha atrás fuera del solar del parqueo y chocando contra el van de TEAMS. También se puede ver a los policías tambaleándose en el área entre el auto y la parte trasera del van. No hay sonido en el video y las imágenes no son lo bastante claras para identificar al policía individual que disparó o el momento de los disparos. Un segundo video de vigilancia del restaurante adyacente al hotel muestra los mismos eventos de un ángulo diferente sin añadir ningún detalle visible del incidente.

Después de analizar todos los hechos y circunstancias de este incidente, la Division of Criminal Justice concluyó que el policía que disparó a Gutiérrez-Valencia actuó apropiadamente bajo la Attorney General’s Use-of-Force Policy en el uso y nivel aceptable de fuerza disparando su M4 carabina a Gutiérrez-Valencia para protegerse y para proteger a sus colegas policías. Un oficial puede usar fuerza mortal en New Jersey cuando el oficial razonablemente cree que es inmediatamente necesario para proteger la vida del oficial o de otra persona o de daño físico peligroso.

El asunto fue revisado por el Director Honig of the Division of Criminal Justice. Todas las partes de la Attorney General’s Directive on Police-Use-of-Force Investigations que estaban en efecto durante el curso de la investigación se cumplieron.

El Division of Criminal Justice Gangs & Organized Crime Bureau obtuvo la acusación judicial de gran jurado en Dic. 5, 2014 en Operation Speed Racer cargando a Gutiérrez-Valencia con posesión de metanfetaminas con intención de distribuirla (en primer grado), conspiración (en segundo grado), posesión ilegal de una pistola (en segundo grado), posesión de una pistola cuando cometiendo una ofensa de drogas (en segundo grado), recibir propiedad robada (pistola) (en tercer grado) y posesión de una pistola con el número de serie de la pistola desfigurado (en cuarto grado). Esos cargos están pendientes. Otros 4 coacusados fueron cargados en primer grado de distribución de heroína y en segundo grado de conspiración de distribuir metanfetamina y heroína.

Un cargo en primer grado de metanfetamina lleva una sentencia de 10 a 20 años en la prisión del estado y una multa de hasta $300,000. Cargos en segundo grado llevan una sentencia de 5 a 10 años en la prisión del estado y una multa de hasta $150,000, y un cargo en segundo grado de arma de fuego lleva un término mandatario mínimo de prisión sin la posibilidad de libertad condicional igual a un tercio y medio de la sentencia impuesta o 3 ½ años y medio o lo que sea mayor. Cargos en tercer grado llevan una sentencia de 3 a 5 años en la prisión del estado y una multa de hasta $15,000, mientras cargos en cuarto grado llevan una sentencia de hasta 18 meses en la prisión del estado y una multa de hasta $10,000.

El Supervising Deputy Attorney General Andrew B. Johns presentó el caso de hoy al gran jurado del estado de parte del Attorney General’s Shooting Response Team.

La acusación judicial de hoy es solamente una acusación y Gutiérrez-Valencia es inocente hasta que se pruebe culpable.

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